Piedra entre piedra, un drama intenso y noblemente inspirado de Hermann Sudermann. Se presentó anoche en el Teatro de la Comedia, la compañía nacional de drama y comedia, que encabeza el notable primer actor don Pablo Acchiardi, cuya temporada en el Novedades se señaló conceptuosamente por su mérito artístico.
El cambio de sala no ha influido en nada para que este criterio en la confección de los programas sufra mengua alguna, si bien la modalidad del público que asiste habitualmente al coliseo de la calle Rivadavia es otra, dedicado como está a la explotación de géneros más populares.
La concurrencia de anoche al debut fue reducida, notando sin embargo entre ella a algunas personas habitúes a la temporada del Novedades y probaban con su presencia estar familiarizados a los espectáculos que la misma compañía ha ofrecido en esa sala. Los fieles que han seguido a Acchiardi en su traslado no han sido pues muchos, pero todavía hay tiempo de que aumenten en las funciones de despedida que faltan. Por otra parte, las obras que en estas se podrán en escena se avienen mucho a la modalidad del público habitué al Comedia, sin quebrar, claro está, esos propósitos que tiene la empresa de hacer teatro propiamente valorable, que ambas cosas caben sin hacer concesiones a la frivolidad o al mal gusto.