La tan esperada actuación de un elenco de categoría, viene a colmarse con el anuncio oficial de la venida al Rivera Indarte de la Compañía Nacional de Comedias, Cervantes, cuyo debut se ha fijado para el día 24 del corriente.
En estas columnas se dedicaron algunos comentarios, a raíz de su creación y de su posterior labor en el Teatro Cervantes, y saludamos la iniciativa como uno de los más ponderables y eficaces esfuerzos en pro de nuestro teatro, tan huérfano de apoyo, de estímulo y aún de dignificación.
La hora era oportuna. Agudizada la indiferencia por las manifestaciones escénicas, más en virtud del lucro mercantil y profesional, que de repudio del público: a aquel alumbramiento de teatro dramático, ennoblecido por la selección y el criterio artístico, cristalizaba viejos anhelos y nacientes esperanzas.
Los primeros resultados, expresivos, por su balance, marcan ya su derrotero definitivo y perdurable, pese a obstáculos y pequeñas miserias, puestas en el camino, necesarias, porque, en este caso han sido acicate de perseverancia en sus organizadores y mantenedores. [….]